Antes de nada ¡feliz año a todos! La receta que os enseño hoy es justo con la que mi familia y yo nos despedimos del 2012. Y una de las poquitas cosas que he podido hacer últimamente ya que mis días libres están muy contados. Espero que os guste, y poder buscar más ratitos durante este año para subir más cositas.
Ingredientes:
- 1
lamina de masa brisa
- Un
poco de mantequilla
- Garbanzos
- 1
lata de peras en almíbar
- 1 rulo de queso de cabra
- 3 huevos
- 200 ml de nata
- Sal
- Queso rallado para gratinar
NOTA: Normalmente suele haber masa brisa en cualquier supermercado, pero en caso de que no la haya nos sirve una masa de hojaldre.
Elaboración:
- Comenzamos la receta
precalentando el horno a 180º. Mientras se calienta engrasamos el molde que
vayamos a utilizar con mantequilla y lo forramos con la masa brisa dejando un
borde de unos centímetros. Para que no suba la masa, la pinchamos con un
tenedor y cubrimos con garbanzos. Horneamos durante unos 15 minutos.
- A continuación, preparamos las
peras caramelizadas. Para ello cortamos cada mitad en dados de tamaño mediano,
secamos un poco el exceso de almíbar y las introducimos en una sartén a fuego
muy fuerte hasta que alcancen un color dorado. Una vez listas, reservamos.
- Cortamos el rulo de queso de
cabra en medallones de un dedo aproximadamente de grosor. Reservamos.
- Seguidamente, batimos en un
bol los huevos y mezclamos con la nata hasta que quede uniforme. Añadimos sal a
gusto.
- Una vez pasados los 15 minutos
retiramos la masa del horno, se extraen los garbanzos y se rellena con los
dados de peras y el queso de cabra. Se vierte la mezcla de nata y huevos y por
último se cubre con el queso rallado.
- Horneamos a 180º durante unos
20-30 minutos o hasta que veamos que la mezcla está bien cocinada.
- Finalizado el tiempo retiramos
del horno y ¡lista para comer!
Que buena pinta!
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